Elie Saab Le Parfum Eau de Parfum 90 ml es una fragancia profundamente femenina, elegante y sofisticada que ha conquistado el corazón de miles de mujeres en todo el mundo. Creada por el maestro perfumista Francis Kurkdjian, esta obra maestra olfativa refleja a la perfección la visión del diseñador libanés Elie Saab, reconocido por su habilidad para resaltar la belleza femenina a través de vestidos etéreos, llenos de luz, fluidez y gracia. Del mismo modo que un vestido de alta costura, este perfume envuelve el cuerpo con un aura de refinamiento, sensualidad y luminosidad que se percibe incluso antes de que la persona diga una sola palabra. Es una fragancia pensada para mujeres que desean proyectar clase sin esfuerzo, una presencia magnética sin estridencias, y un estilo que combina la tradición con la modernidad.
Desde la primera pulverización, Le Parfum se despliega como un rayo de luz dorada gracias a su nota protagonista: la flor de azahar del naranjo. Esta flor blanca, símbolo de pureza y feminidad, brilla con fuerza desde el inicio, desprendiendo un aroma fresco, vibrante, ligeramente meloso y profundamente solar. No es una flor tímida ni discreta, sino una declaración de presencia. Esta apertura evoca imágenes de jardines mediterráneos bañados por el sol, de mañanas cálidas donde la brisa lleva consigo el perfume de las flores recién abiertas. La flor de azahar en esta composición está cuidadosamente balanceada: mantiene su carácter dulce, pero sin llegar a lo empalagoso, y deja entrever ya desde los primeros segundos el carácter refinado y elegante de lo que está por venir.
A medida que la fragancia se asienta en la piel, su corazón floral comienza a tomar protagonismo. Aquí aparece el jazmín sambac, conocido por su aroma opulento, ligeramente afrutado y muy femenino. Este jazmín no es agudo ni invasivo, sino suave, cremoso y envolvente, como una caricia de seda. Le sigue el patchoulí, que aporta una dimensión más terrenal, cálida y elegante. El patchoulí en esta fragancia no tiene el carácter terroso ni bohemio de otras composiciones; aquí está filtrado por la luz y la dulzura de la miel de rosa, lo que lo hace accesible, sofisticado y lujoso. Este corazón es el momento de plenitud de la fragancia, donde todo se armoniza: la dulzura de la flor, la riqueza del jazmín y la profundidad del fondo comienzan a entrelazarse en una danza olfativa hipnótica.
El secado del perfume, es decir, la fase en la que queda su esencia más duradera, está construido sobre una base de cedro de Virginia, miel, rosa, y un fondo ligeramente ambarado. El cedro aporta estructura y fijación, la miel se convierte en un velo suave y cálido que abraza las flores, y la rosa reaparece para aportar una dimensión romántica y atemporal. Esta base es elegante, sutilmente dulce, pero siempre contenida. El aroma no se convierte en algo abrumador ni invasivo, sino en un aura elegante y persistente que acompaña con naturalidad durante toda la jornada. Puede durar más de 8 o incluso 10 horas dependiendo del tipo de piel y la aplicación, dejando una estela moderada, siempre presente, pero nunca molesta. Ideal para mujeres que buscan elegancia, no protagonismo forzado.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.